Por María Laura García
La Navidad no es solo una festividad en el calendario; es un portal hacia lo sagrado y una oportunidad inigualable para conectar con nuestro espíritu. A menudo, el ruido de las responsabilidades diarias nos hace alejarnos de lo esencial, pero este tiempo debería constituir el espacio para compartir con nuestros afectos más profundos, esos que a veces dejamos en «pausa» por el exceso de obligaciones. Es el momento ideal para decirle a quienes amamos que los llevamos tatuados en el corazón.
Vivir desde el agradecimiento es una de las herramientas más potentes para la salud mental. Como bien señala el Dr. Robert Emmons, el mayor experto mundial en el estudio científico de la gratitud, esta no debe ser un acto pasivo de «merecimiento», sino una práctica activa. Emmons sostiene en sus investigaciones que quienes agradecen de forma consciente no dan nada por sentado y, por ende, experimentan niveles de felicidad un 25% más altos. El que agradece, sonríe siempre, porque se siente afortunado incluso en la sencillez de lo inmaterial.
Aprovecha: ¡Haz auditoría de tu 2025!
Estamos en la fecha perfecta para hacer un balance honesto de lo logrado. Toca revisar qué tanto de lo que nos propusimos en enero de este 2025 —con una mirada realista— logramos concretar. Si alcanzamos las metas, la satisfacción debe ser nuestro motor; si quedaron pendientes, no es momento de culpa, sino de lo que yo llamo un recalculo. Al igual que un GPS, si nos desviamos, simplemente ajustamos la ruta para seguir trabajando en este 2026 que asoma en el horizonte; o simplemente busquemos nuevas formas y caminos para lograr lo que deseamos.
Pero ¡Cuidado! el balance no debe ser solo numérico o material. La salud mental y espiritual exige preguntas más profundas que los especialistas en bienestar, como el Dr. Tal Ben-Shahar, profesor de Harvard y experto en la ciencia de la felicidad, sugieren hacernos al final de cada ciclo:
– ¿Qué tanto crecí espiritualmente? ¿Soy hoy una versión más compasiva de mí misma que hace doce meses?
– ¿Qué tanto cuidé mi salud física y mental? Debemos recordar que el amor propio no es egoísmo; es la gasolina que nos permite evolucionar y tener energía para volcarla en los demás aspectos de la vida. Sin salud, el éxito es una cáscara vacía.
– ¿Qué tanto nutrí mis relaciones personales y laborales? La conexión humana es, según el estudio de desarrollo adulto de Harvard (el más largo de la historia), el factor número uno de longevidad y plenitud.
– ¿Qué cosas nuevas aprendí y cuánto ayudé a otros? Contribuir a mejorar el entorno es lo que finalmente le da sentido a nuestro paso por el orbe.
Hacia un 2026 con Intención…
Cerrar el año respondiendo estas interrogantes nos permite no empezar el siguiente «en automático». El 2026 no debe ser solo un cambio de cifra, sino una evolución consciente de nuestra esencia. Al mirar hacia atrás con gratitud y hacia adelante con un plan o própósito, transformamos la incertidumbre en una aventura emocionante.
Mini Manual para dinamizar y hacerte eficiente este 2026 …
Para que tus propósitos no se queden en deseos de medianoche, te comparto estas recomendaciones basadas en la psicología conductual para gestionar tu nuevo año:
- Te propongo hacer la «Rueda de la Vida» como Diagnóstico. Dibuja un círculo dividido en secciones (Salud, Dinero, Amor, Espíritu, Aprendizaje). Puntúa del 1 al 10 cómo te sentiste en cada área este 2025. Elige solo dos áreas para priorizar en el primer trimestre del 2026. Querer cambiar todo a la vez es la receta para no cambiar nada.
- Te recomiendo los “Sistemas sobre Metas” de James Clear. En lugar de decir «quiero estar sana», establece el sistema: «Caminaré 20 minutos de lunes a viernes». Las metas te dan una dirección, pero los sistemas son los que te hacen progresar cada día.
- Comienza a llevar un diario de gratitud diaria. No esperes a diciembre para agradecer. Compra una libreta y anota cada noche tres cosas buenas que pasaron en el día. Esto «entrena» a tu cerebro para buscar lo positivo en medio del caos, fortaleciendo tu resiliencia ante las dificultades que el nuevo año pueda traer.
- Conéctate permanentemente con tu salud mental. Bloquea en tu agenda de 2026 espacios innegociables de «desconexión digital» y descanso. El Dr. Rick Hanson, autor de Hardwiring Happiness, explica que descansar conscientemente permite al cerebro integrar las experiencias positivas y reducir el impacto del estrés.
- Practica el ritual llamado «Palabras Faro». Elige una sola palabra que resuma lo que quieres en este 2026 (ejemplo: Paz, Disciplina, Expansión, Servicio, etc.). Deja que esa palabra sea el filtro para tus decisiones importantes durante todo el año.
Finalmente …
Cerremos este 2025 con la certeza de que cada experiencia vivida en este ciclo, incluso aquellas que nos obligan en el presente a recalcular la ruta, han sido peldaños fundamentales para nuestra evolución. No permitamos que el ruido de lo que sucede a nuestro alrededor y nuestras obligaciones opaquen el brillo de nuestra esencia. Que el 2026 nos encuentre más presentes, más compasivos y, sobre todo, más conscientes de que el autocuidado y el amor propio son los cimientos sobre los cuales se construye el éxito y la realización verdadera. Hagamos que este nuevo año no sea un auténtico renacer de nuestro bienestar integral.
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